El estado de las cosas

Feliz Navidad! Y Feliz Año! Y feliz San Valentín, si llego a tardar un poco más en dar señales de vida...

A ver, vamos al grano. A día de hoy hace algo más de un mes que no actualizo el blog, y casi el mismo tiempo que no ando por redes sociales excepto para chafardear de vez en cuando por Facebook y Twitter. Y esto, pese a que no es un parón excepcionalmente largo para los habituales del blog, es un parón que me duele, porque es ahora cuando más ideas tengo para la criatura. Así que os escribo cuatro cosas para dejar claros ciertos asuntos y, de paso, tranquilizar a aquellos que bien podrían haberme dado por muerto. Otra vez.

A día de hoy mi mayor enemigo, y esto ha sido especialmente cierto a lo largo de 2015, es el tiempo. El tiempo que no tengo debido sobretodo al trabajo. Tampoco os penséis lo que no es: Soy un simple vendedor en una tienda de videojuegos, pero por cuestiones de horario y de localización paso fuera de casa una cantidad de horas desproporcionada, especialmente en los dos últimos meses, que mi oficio ha consistido en ser los Reyes Magos, Papá Noel, y hasta los malditos duendes. De hecho, ésto mismo lo estoy escribiendo desde el teléfono, sentado en la cafetería de delante de mi tienda esperando a que acabe mi pausa. A esto le añado que, cuando te pasas el día entero vendiendo Call of Dutys y FIFAs a madres histéricas,  lo último que quieres hacer al llegar a casa es ponerte a jugar al juego de lucha de Los Simpson.

No estoy diciendo que no lo disfrute. Al contrario, adoro lo que hago aquí y ojalá pudiera invertir más tiempo en ello. Pero también requieren de mí un tiempo y un estado de ánimo que me ha costado mucho encontrar últimamente,  de ahí mis"vacaciones".

Con todo, a veces la paciencia da sus frutos.

Por fin, tras un 2015 maravilloso pero agotador, han llegado a mi vida una serie de cambios que, si todo va como debe, me permitirán disponer del tiempo y las energías  (porque ganas no me faltan) de retomar ciertas actividades que se habían resentido. Eso incluye, por supuesto, Asco de Juego. Para lo cual he elaborado una lista de "propósitos" de año nuevo que ahora comparto con vosotros, pacientes lectores y amigos.

-La gran pendiente, y sobra decirlo, es la serie de animación de Zelda, que voy haciendo por tandas para no agotar a los lectores... y a mí mismo. Pero sigue ahí, con nuevos capítulos esperándonos.

-En cuanto a juegos, hay varios pendientes. No pocos son los que me han comentado, y con razón, que debería darme un paseo por Steam Greenlight, aunque no suelo ir a por el indie. Pero hay algunos casos que merecen atención especial, y serán tratados.

-También me quedé con la espinita de tratar alguno de los muchos juegos deleznables que nos ha dado Star Wars, así que no lo descartéis.

-Estoy preparando un artículo sobre juegos de golf raros, que aunque no lo parezca es un subgénero que dará mucho de si. Ese será de los primeros que vengan.

-Sonic the Hedgehog (2006), Sonic Boom y el muy reciente Tony Hawk 5 son tres juegos que pensé en tratar y me han pedido, pero no tengo claro hasta qué punto resultaría gracioso un artículo escrito sobre ellos. Tengo que meditar al respecto.

-Ya pasando a temas de la página en sí,  pese a que ya hay dominio propio sigue haciendo el burro si no se escribe el www. Eso tengo que arreglarlo.

-Hace eones que hablo de sortear una camiseta, aunque tengo que acabar de decidirme con el diseño. Eso también es una prioridad. ¿Motivo del sorteo? PORQUE SÍ.

-Me gustaría, de vez en cuando, escribir sobre algo que no sean videojuegos horribles. Podría simplemente hacerlo y quedarme tan ancho, pero soy de la generación Facebook y si no público en Internet todo lo que escribo y opino mi ego se resiente. Así que me falta decidir el "cómo". ¿Abro un blog aparte? ¿Creo una sección off-topic de AdJ? ¿Me ofrezco a colaborar en algún sitio que busque redactor? Algo se me ocurrirá.

Probablemente se me olvide algo. Pero el hecho es que en nada me toca volver a trabajar, y ya va siendo hora de que no os entretenga. Quiero daros las gracias a todos por seguir visitando y apoyando el blog menos constante de la Red. Vuestra paciencia y vuestras sonrisas me alegran mucho más de lo que os imagináis, y espero convertir 2016 en un año en el que AdJ os recompense por ello.

¡Un abrazo muy fuerte a todos!